El soldador que quiere probar que es hijo de el del medio de Los Chichos: «Le pidió a mi madre abortar»
Sonaba Nino Bravo y Los Chichos en casa de David cuando éste apenas era un niño de 5 o 6 años. «Este que está cantando es tu padre» , le decía su madre ante la incredulidad de este pequeño. Se refería a Jero, el vocalista y compositor de la banda, con quien años atrás había tenido una relación, fruto de la cual nació él. Los años fueron pasando y en su entorno, familia y amigos, conocían la historia y se sorprendían con el gran parecido físico que guardaba con el cantante, que tenía otros dos hijos de su matrimonio con Araceli Borja. Sin embargo, éste murió cuando David apenas tenía 11 años y, siendo ya adulto, cuando quiso empezar una relación con sus hermanos -con su abuela paterna sí la tuvo-, lo único que encontró fue silencio. A sus 41 años y con una vida asentada en Madrid, este soldador de laboratorio, que es padre de tres hijas, quiere que se sepa la verdad y demostrar científicamente que la sangre de los Chichos corre, literalmente, por sus venas. «Al final la gente te tacha de falso y, sobre todo, lo hago por el honor de mi madre», defiende en conversación con ABC.Noticia Relacionada El del medio de 'Los Chichos' estandar No Un hombre trata de probar que es hijo de Jero con el ADN de un cigarro Lorena Gamarra David España ya intentó sin éxito hace años ser reconocido como hijo del cantante y ahora presenta pruebas de ADN compatibles al 99%, según su defensaPara ello, tras meses de espera, ha conseguido una muestra de ADN obtenida de la colilla de un cigarro de Chaboli que, asegura, tiene un 99.99% de compatibilidad. Pero para entender cómo ha llegado hasta este punto hay que remontarse a décadas atrás.En concreto, a 1982, cuando comenzó esta historia. Entonces, Conchi era solo una joven de apenas 16 años de familia humilde que trabajaba en un tablao flamenco de Madrid. Allí fue donde le presentaron a Jero, que ya por entonces superaba la treintena. «Mi madre se enamoró. Le encantaba cómo cantaba , cómo componía y todavía a día de hoy a veces se levanta y me dice: 'me he tirado toda la noche soñando con tu padre'», cuenta David. «Mi madre se enamoró. Le encantaba cómo cantaba, cómo componía y todavía a día de hoy a veces se levanta y me dice: 'me he tirado toda la noche soñando con tu padre'»Lejos de tratarse de una relación esporádica, Conchi llegó a acompañarle en algunas de sus giras hasta que en 1985 se quedó embarazada. El cantante, que por aquel entonces ya estaba casado y tenía dos hijos -Chaboli y Adelina-, le pidió que no siguiera adelante. Es entonces cuando todo se acaba. «Cuando mi madre le dice a mi padre que está embarazada, él le pide abortar y mi madre dijo que no. Mi abuela, que tenía siete hijos le dijo: 'de eso nada, tú tienes al niño y se cría aquí entre todos' ».Y así fue. David se crió con su madre y su familia materna, aunque recuerda haber visto a su padre en alguna ocasión cuando él era solo un crío. «Vino en algunas ocasiones a casa, una de las veces venía con mi hermano Chaboli en un coche rojo, me acuerdo perfectamentte. Salió del coche y yo subí para arriba, que venía del colegio, y avisé a mi madre, que me dijo: quédate aquí. No sé qué hablaron, que el otro salió haciendo ruedas. En otras ocasiones yo era más pequeño y casi no lo recuerdo. Cuando le daba la neura o algún remordimiento de conciencia, pues venía y hablaba con mi madre. De hecho, me parece que unos días antes de que se suicidase vino a hablar con ella y quería verme».Con su abuela paterna tuvo una gran relaciónJero murió hace ya 30 años lanzándose desde el balcón de su casa en Madrid. «La pena que llevo es no haber tenido relación con mi padre», lamenta David, que solo tenía 11 años cuando el artista falleció. Sin embargo, después de ello ganó una abuela con la que ha tenido relación hasta su muerte. «Desde que se suicidó mi padre y ella se enteró, quiso conocerme. Vino un familiar a casa a preguntarme si quería conocer a mi abuela, me preguntó mi madre con total transparencia y libertad si quería ir, me parece que tenía 11 o 12 años y le dije que sí. Fuimos a conocer a mi abuela, esa mujer tan entrañable que me cautivó y bueno, empecé a tratar con ella, iba los fines de semana a verla y nada, luego ya se metió la residencia. De la residencia me la llevé algunas veces, estuvo en mi casa tres o cuatro días, cinco días, incluso estuvo en mi boda», explica David, que asegura tener grandes recuerdos de ella y también fotografías que por ahora no quiere difundir. «Yo he tenido trato con mi abuela y mi abuela era consciente de quién era yo y en la residencia decía a la gente que era su nieto. La he llevado a sus bisnietas, o sea, las ha conocido y todo hasta que la mujer falleció».«Unos días antes de que se suicidase vino a hablar con mi madre y quería verme»Sin embargo, el reconocimiento de la abuela no fue suficiente para entrar en la familia. «Ella no quería conflictos, pero luego ya se fue destapando cuando iba a la residencia». Así, intentó ponerse en contacto con sus hermanos, sobre todo con Chaboli, pero nunca recibió respuesta. «Yo trataba con la famiia y siempre he dicho que no quería nada, pero de tanto insistirme la gente, oye, reclámalo... A mí siempre me ha faltado la figura de un padre y siempre he tenido la incertidumbre, a pesar de que mi madre me decía que era mi padre y que la gente me decía que era igual, pues siempre tenía incertidumbre de que me certificase 100% quién era. Intenté contactar con mis hermanos pero no ha sido posible así que ya decidí un día poner la demanda».Su madre siempre quiso mantener el asunto en privado, pero apoyó la decisión de su hijo. La primera vez que fue al juzgado fue hace casi cinco años pero no fructificó porque no había pruebas consistentes más allá de un gran parecido físico. Ahora, de la mano de Fernando Osuna, el abogado de los hijos ilegítimos de los famosos -ha ganado más de 140 demandas de paternidad, entre ellas a Julio Iglesias o el Cordobés- espera poder demostrar definitivamente que es hijo de Jero. La pasada semana presentaron ante un juzgado del Puerto de Santamaría algo que sería clave: una prueba de ADN obtenida de la colilla de un cigarro que correspondería a Chaboli, el que sería su hermano, y que tras ser recogida fue directamente a un laboratorio. Las pruebas genéticas, asegura David, tienen una coincidencia del 99,99%. Con ella, espera que el juez reabra su causa tras una nueva verificación científica en sede judicial se determine el parentesco.El objetivo en un primer momento, dice, solo era ser reconocido y demostrar a su entorno la verdad, pero con los palos en las ruedas que asegura le han puesto sus hermanos -de confirmarse la hermandad- asegura que va a ir «a por todo», ya sea su parte de herencia como derechos de autor que le pueda corresponder, aunque eso sería, en todo caso, en un posterior caso judicial. «Las circunstancias, con el gasto que me ha supuesto todo esto -lleva gastados más de 20.000 euros en todo el proceso- el dolor de cabeza, el quebradero que me ha dado, creo que estoy en mi derecho totalmente, voy a luchar por todo. No voy a dar un paso atrás y voy a luchar hasta el fin».

