El trail quiere ser olímpico: el complejo reto de llevar a los Juegos las carreras de montaña
Sin una pirámide federativa, marcas y circuitos privados impulsan un camino que necesita un producto televisivo sólido y el apoyo de World Athletics
Nadie en el trail hace ascos a los aros olímpicos, pero la ecuación para entrar en el programa de unos Juegos tiene muchas incógnitas. Hay puntos a favor, como la creciente popularidad del deporte, cimentado en valores como cuidar la naturaleza, su abanico completo de generaciones, y el plan siempre atractivo de ponerse unas zapatillas, patear monte —el menú de distancias es amplio— y apartar unas horas la vista del móvil.
Las marcas, sus grandes impulsoras ante la ausencia de una sólida estructura piramidal federativa, tienen beneficios al alza y entienden que esta vía solo los aumentaría. No requiere, a priori, un sudoku normativo, pues bastaría con incluirlo como una disciplina más de World Athletics, la federación internacional de atletismo. Suena bien, pero la cuadratura del círculo exige que los circuitos privados —y las marcas que los financian— acuerden crear una cúspide. Y un producto televisivo solvente, que aún no existe en zonas de difícil acceso, sin perder la esencia aventurera.
Salomon, patrocinadora de las Golden Trail World Series, el principal circuito de la media distancia, llevó a sus finales de octubre en los Alpes italianos de Ledro una cartelería que reivindicaba la presencia en los Juegos. “Creemos que el formato corto es el más apropiado para que el trail se convierta en deporte olímpico”, resume el jefe global de marca de la firma, Scott Mellin. Carreras en la frontera de las dos horas —con la excepción de la maratón de Zegama, de cuatro— que han generado “una audiencia fuerte”. Al anunciar en abril su acuerdo con Warner Bros, planteó el horizonte de Brisbane 2032. Un reto que se sustenta en un deporte que superaba en 2024 como negocio los 4.000 millones de dólares (3.400 millones de euros) y que crece, según sus proyecciones, un 7,5% anual. No alcanza las dimensiones del asfalto —23.000 millones—, que en cambio crece un 4%.
“Creemos que hay 33 millones de trail runners en el mundo”, apunta Mellin. EE UU lidera la lista con 13,5 millones en un panorama con aproximadamente dos millones de corredores —los que se ponen un dorsal— en unas 5.000 carreras. “Es un deporte muy maduro con una verdadera infraestructura detrás”, asegura Scott Mellin.