Italia desmantela una red de financiación de Hamás camuflada como ayuda humanitaria
Bajo el paraguas de la solidaridad, en Génova y en la capital financiera de Italia, Milán se tejió y consolidó durante más de dos décadas un circuito estable de captación y envío de dinero a Hamás , organización considerada terrorista por la Unión Europea . La operación policial de este sábado culminó con la detención de nueve personas. Según ha explicado el ministro del Interior, Matteo Piantedosi , se trata de una estructura «con verdaderos fines terroristas de naturaleza islamista». Lo que a ojos del donante medio suponía una contribución económica legítima para ayudar a los huérfanos y familias necesitadas en Gaza, era en realidad, según la Fiscalía de Génova y la Dirección Nacional Antimafia (DNA), una arteria vital de financiación para Hamás. Entre los detenidos, el nombre más visible de la causa es Mohammad Hannoun , arquitecto de origen palestino residente en Génova y figura conocida del activismo propalestino en Italia. Los investigadores lo señalan como cerebro de la «célula italiana» y como integrante del «aparato exterior» de Hamás: la estructura en el extranjero que, según la hipótesis judicial, sirve para sostener relaciones y financiación. La reconstrucción oficial sitúa la operativa alrededor de varias asociaciones, entre ellas la A sociación Benéfica de Solidaridad con el Pueblo palestino (fundada en Génova en 1994), su rama como organización de voluntariado creada en 2003, y La Cúpula de Oro , abierta en Milán ese mismo año. Los investigadores citan además otra asociación, La Palma , como instrumento utilizado para facilitar la actividad en el circuito financiero. La Fiscalía cifra en 7.288.248 euros el dinero que, desde 2001 y con un repunte significativo tras el 7 de octubre de 2023, habría terminado directa o indirectamente en Hamás o en entidades consideradas vinculadas o controladas por el movimiento. Los fiscales añaden que esa cantidad equivaldría a «más del 71%» de lo recaudado por las asociaciones investigadas.Noticia Relacionada Dos años de contienda estandar Si Belén espera esta Navidad el milagro del turismo tras la guerra en Gaza Mikel Ayestaran Después de dos años de contienda en la Franja, la cuna de Jesús confía en que la llegada de visitantes vuelva a reactivar la economía de esta ciudad palestina en CisjordaniaLa ruta del dineroLa mecánica descrita combina donaciones, transferencias bancarias y triangulaciones entre jurisdicciones . Parte del dinero habría salido de Italia mediante transferencias y «otras modalidades», a veces pasando por asociaciones o intermediarios con sede fuera del país, antes de llegar a organizaciones en Gaza y en los Territorios Palestinos. En algunos casos, según la nota oficial, se trataría de entidades declaradas ilegales por Israel por su conexión con Hamás. El comunicado menciona además a Osama Alisawi , descrito como exministro del gobierno 'de facto' en Gaza, señalado como interlocutor para solicitudes o destino de apoyo financiero.Los investigadores describen asimismo una adaptación constante al entorno financiero: si se cerraban cuentas o se endurecían controles, el circuito habría recurrido a nuevas siglas para sostener la recaudación y los envíos. En esa lógica, la Fiscalía apunta a transferencias de importe elevado, fragmentadas o encadenadas, con el efecto de dificultar el seguimiento del origen y del destino final.La Fiscalía apunta a transferencias de importe elevado, fragmentadas o encadenadas, con el efecto de dificultar el seguimiento del origen y del destino finalUn capítulo especialmente sensible del sumario se refiere al presunto uso de fondos para sostener a familiares de autores de atentados o a parientes de detenidos por terrorismo. La tesis de la Fiscalía es que ese sostén no sería un gesto asistencial neutro, sino una palanca estratégica: garantizar ayudas económicas reforzaría la cohesión interna y favorecería nuevas adhesiones.Puntos ciegosLa investigación, según las autoridades, arrancó con el análisis de operaciones financieras sospechosas. A partir de ahí se amplió con intercambios informativos con otros países europeos -con especial mención a Países Bajos- y con documentación remitida por Israel en el marco de la cooperación judicial. Ese componente transnacional es clave: cuando el dinero cruza fronteras, cambia de intermediarios y se etiqueta como «humanitario», la trazabilidad se vuelve porosa y el control depende tanto de alertas bancarias como de coordinación entre fiscalías y fuerzas policiales.El ministro del Interior, Matteo Piantedosi, destacó el alcance de la operación policial y afirmó que «se han puesto al descubierto» conductas que, «detrás de la cortina» de iniciativas solidarias, ocultarían apoyo a organizaciones terroristas. Piantedosi puso el acento en la reconstrucción de flujos internacionales y en el trabajo de las unidades especializadas para seguir la ruta del dinero.Un capítulo especialmente sensible del sumario se refiere al presunto uso de fondos para sostener a familiares de autores de atentados o a parientes de detenidos por terrorismoEn su comunicado, los fiscales Giovanni Melillo y Nicola Piacente introducen una aclaración deliberada para evitar lecturas maniqueas o ideológicas. Por un lado, subrayan que la investigación sobre una presunta financiación de Hamás desde Italia no pretende ni puede minimizar el sufrimiento y los crímenes cometidos contra la población palestina tras el 7 de octubre, un asunto que, recuerdan, está bajo el escrutinio de la Corte Penal Internacional . Pero, al mismo tiempo, añaden un segundo mensaje: incluso en un contexto de guerra y de violaciones graves del derecho humanitario, el terrorismo contra civiles no puede quedar legitimado. Dicho de otro modo, la existencia de crímenes contra los palestinos no convierte en 'comprensibles' ni menos punibles los atentados de Hamás; son dos planos distintos que deben juzgarse por separado.Las claves y el rostro de la doble vida El cerebro de la red, Mohammad Hannoun, encarna la complejidad del caso. Arquitecto de profesión con estudio en Génova, este palestino nacionalizado italiano supo navegar durante décadas entre la labor humanitaria y el activismo político de alto nivel. Figura muy destacada de la comunidad palestina en Italia, Hannoun defendía su transparencia alegando que sus fondos solo ayudaban a «huérfanos y familias». La investigación nació de alertas financieras y siguió un patrón clásico: donativos presentados como ayuda a Gaza, envíos por transferencias y transporte en efectivo, así como triangulaciones con intermediarios fuera de Italia. La Fiscalía sostiene que parte del dinero acabó en entidades vinculadas a Hamás. Cuando subían los controles, el circuito se habría sostenido con nuevas siglas de asociaciones para mantener recaudación y transferencias.La defensa de Hannoun ha negado que financiara terrorismo y sostiene que los fondos se destinaban a huérfanos y familias necesitadas. Su abogado ha reivindicado además que su actividad era pública, con visitas al Parlamento e iniciativas conocidas y contactos institucionales, incluidos interlocutores políticos de distintos ámbitos. La pregunta que deja el caso es cómo proteger la ayuda legítima a Gaza sin abrir, en el mismo gesto solidario, un corredor para la financiación del terrorismo.

