Que si la España vaciada, que si la juventud que no hace nada, que si el futuro, que si... y una leche. Los jóvenes son los que mantienen los pueblos vivos. Los que se resisten a irse, los que mantienen las tradiciones, los que invierten tiempo y esfuerzos (ni agradecidos ni pagados) para que todos disfruten en las fiestas de verano. 

Ya saben la que se ha liado en Villamanín, un pueblecito (por cierto, bonito y de buen comer) en León. Un grupo de jóvenes de entre 18 y 25 años, que forman la comisión de fiestas, se curran unas papeletas de participación para el Gordo de Navidad, para sacar dinero para las fiestas. Toca el gordo en su número y todos los vecinos de un pueblo de menos de 1.000 habitantes se llevan 80.000 euros. En Villamanín con eso te compras una casa. 

El caso es que a uno de los chavales se le olvidó consignar un taquito de papeletas, por lo que faltaban 4 millones de euros. El resultado: que en lugar de 80.000 euros, salían a 75.000 euros por persona. 

Pues lejos de pensar "oye, que gracias a estos chavales me han tocado 75.000 euros", lo que han pensado la mayoría (salvo honrosas excepciones) es "YO QUIERO TÓ MI PREMIO". 

Y después de una reunión los chavales, que trabajan gratis para que el pueblo siga vivo, para que haya conciertos y comidas, y juegos y vida, han tenido que renunciar a su parte. Con lo jodida que está la vida, sí, hay quien ha votado a favor de que esos chavales se queden sin sus 75.000 (de las papeletas que ellos mismos habían jugado) para llevarse ellos unos 2.500 más. 

No solo eso, es que encima hay unos pocos que no están contentos con que los chavales hayan sido lapidados, acosados, acusados de fraude y se queden sin dinero: quieren denunciarles para cobrar los 80.000 euros en lugar de unos 77.600. La avaricia y la ruindad hecha reclamación. 

Esa misma gente, que no mueve el culo por su pueblo, después acude a las fiestas. Y quiere que haya música, y tasca, y sorteos y que su pueblo no me muera. Pero no mueve el culo. 

Y así estamos. Gente que le quita el premio a quienes han hecho posible que ellos lo ganen. El patrón de Villamanín es San Juan Degollado. Le están haciendo honor al patrón con su conducta a quienes les benefician. 

¿Qué lección es esta para la juventud? ¿Para los miles de jóvenes de toda España que de forma desinteresada son proactivos y tienen iniciativa? ¿No te muevas que encima te comes un marrón? Avariciosos: gracias a la Comisión de Fiestas tenéis un pastizal. Desagradecidos. 

Gente de la Comisión de Fiestas: no estáis solos. Apreciamos vuestra labor. Eso sí: espero que este año de las fiestas se ocupen los avariciosos. A ver qué tal lo hacen.