La verdad histórica del Día de los Inocentes: «Herodes fue el mejor rey de los judíos»
Unos versículos del Nuevo Testamento bastaron para alumbrar una festividad a la que ya contemplan más de dos milenios de historia. En el siglo I d. C. el evangelista San Mateo escribió que, cuando Herodes I el Grande supo por boca de los Magos de Oriente que el Mesías había nacido en un portal, «se puso furioso y mandó matar, en Belén y sus alrededores, a todos los niños menores de dos años». Fue la solución más rápida que halló el perverso monarca de Judea para no acabar destronado a manos de Jesús, y el resultado fue tan sonado que pasó a los libros posteriores como la Matanza de los Inocentes: uno de los episodios más populares de la Navidad.Eso es lo que narra la tradición cristiana; la realidad histórica, sin embargo, esconde más enigmas que datos fehacientes. «No existe información extrabíblica que haga referencia a la Matanza de los Inocentes . Es algo llamativo porque sobre Herodes existen muchísimos datos en las crónicas elaboradas por autores judeo-romanos como Flavio Josefo. Que éste no la cite a pesar de ser un hecho tan bárbaro implica que no sucedió». Jaime Vázquez Allegue , doctor en Teología Bíblica por la Universidad Pontificia de Salamanca y doctor en Periodismo, baja la voz; casi le duele arremeter contra uno de los mitos más extendidos de estas fechas, pero ya es hora. «En realidad, es una metáfora con diferentes intenciones, desde simbólica hasta de ruptura con el judaísmo», añade en declaraciones a ABC.Noticia Relacionada estandar No La arqueología destruye los mitos de los vikingos: «No eran sucios ni fanáticos religiosos» Manuel P. VillatoroJavier Alonso López , biblista y profesor de Humanidades en la IE University, es igual de tajante que su colega. «Me juego una mano a que no ocurrió», explica socarrón a este diario. El autor de ' Cómo nació el Cristianismo. De Jesús de Nazaret a la Iglesia ' (Shackleton Books, 2025) y colaborador habitual de la revista 'Desperta Ferro' defiende que, desde el punto de vista histórico, estos versículos carecen de valor. «De Herodes sabemos muchísimo. Aunque no fue contemporáneo suyo, Flavio Josefo conocía todos los detalles de su vida. En sus crónicas narró sin pudor los crímenes que había perpetrado, no se ahorró uno. ¿Por qué no decir nada de éste, cuando fue una auténtica barbaridad?», sentencia. Y añade que está convencido de que «el mensaje de la Matanza de los Inocentes es puramente teológico», y nada más.Encajar las fechasVaya si llevan razón los expertos: los datos sobre la Matanza de los Inocentes son escasos y su origen último son los seis versículos rubricados por San Mateo. En ellos, el evangelista dejó sobre blanco que, «después de que los magos partieron de Belén , el ángel del Señor se le apareció en sueños a José» y le dijo que huyera a Egipto con Jesús y María. «Cuando Herodes se dio cuenta, [...] se puso furioso y mandó matar, en Belén y en sus alrededores, a todos los niños menores de dos años», escribió. Fue así como se cumplieron las palabras del profeta Jeremías: «En Ramá se oyen sollozos y lamentos: es una madre, que llora por sus hijos, porque ya están muertos».«No existe información extrabíblica que haga referencia a la Matanza de los Inocentes» Jaime VázquezY poco más se sabe. «La Matanza de los Inocentes solo se vuelve a citar en dos Evangelios apócrifos posteriores, pero hablamos de obras escritas entre los siglos IV y V con poca credibilidad histórica», señala Vázquez. Lo más probable, añade, es que esos textos bebieran del propio San Mateo. «En realidad, la escasez de datos es habitual cuando hablamos de los orígenes de Jesús. De su infancia apenas tenemos constancia; casi no sabemos nada de ella más allá de algún detalle puntual sobre su nacimiento o del momento en el que, según cuenta Lucas, se perdió en el Templo de Jerusalén a los 12 años, y este último episodio es otra metáfora», finaliza.La ambigüedad del texto hace que sea imposible encontrar el momento exacto en el que se habría perpetrado el episodio; para descubrirlo solo nos queda la elucubración. «Los historiadores coinciden en que Herodes I el Grande falleció alrededor del 4 a. C. Como poco, Jesús habría tenido que nacer ese año para que el monarca ordenara la matanza», señala Vázquez. Aunque sorprenda, sostiene que esta posibilidad sí sería plausible: «Suena muy raro, pero Jesús nació en realidad 'antes de Cristo'. Una de las causas son los errores del calendario cristiano; fallos que se han corregido varias veces a lo largo de la historia hasta llegar al actual, que es el Gregoriano, y que han modificado las fechas».'La degollación de los inocentes por Herodes', de José Ginés Marín, en la Academia de Bellas Artes de San Fernando ABCLa única pista para hallar la fecha en la que se perpetró la matanza la ofreció San Lucas. En su Evangelio, el discípulo escribió que el alumbramiento de Jesús sucedió cuando el emperador Augusto «promulgó un edicto para que todo el mundo fuese empadronado». La medida derivó en un censo por todo el Imperio que en Judea, que formaba parte de la provincia romana de Siria, se hizo «siendo Quirino su gobernador». Vázquez se declara de nuevo escéptico: «No salen las cuentas. El llamado Censo de Quirino se fecha alrededor del año 6 d. C., así que existe una década de diferencia con la muerte de Herodes». El experto defiende que la finalidad de los textos sagrados al llevar a cabo esta «adaptación cronológica» era fortalecer la historicidad de los acontecimientos.Vino de EgiptoEncontrar por qué San Mateo introdujo la Matanza de los Inocentes en sus textos es igual de complejo. Alonso cree que buscaba equiparar a Jesús con Moisés, y las similitudes son obvias: según el Éxodo, el faraón de Egipto quiso evitar el ascenso del futuro «rey de los judíos» asesinando a todos los primogénitos hebreos. «Hay muchos ejemplos dentro de su Evangelio. Uno de ellos es que es el único que nos habla del sermón de la montaña». El episodio, defiende, es equiparable al momento en el que Moisés ascendió al monte Sinaí para recibir las leyes de Dios. Incluso añade que «la mayor parte de niños divinos del mundo antiguo pasaron por intentos de asesinato en su infancia», desde Ciro el Grande, hasta Rómulo.'La Matanza de los Inocentes', fresco de Matteo di Giovanni ABCVázquez, por su parte, sostiene que la Matanza de los Inocentes no es más que una justificación: «Los hebreos del siglo I d. C. veían a Herodes como un gran mandatario. El cristianismo primitivo tenía que romper con el judaísmo, y qué mejor forma de hacerlo que cargar contra Herodes». Para el doctor en Teología, el episodio no es más que una metáfora de esa separación. Gran monarcaLa verdadera historia de Herodes tiene más luces que sombras . En el año 47 a. C., este controvertido personaje fue nombrado por Roma procurador de la antigua Judea y, poco después, ascendió hasta el poder valiéndose de su influencia con la Ciudad Eterna. De métodos crueles con sus enemigos, eso es innegable, logró del entonces triunviro Marco Antonio –al frente de la región oriental del Imperio– el título de monarca de la región. A partir de entonces, se convirtió en un fiel aliado de las legiones, pero, tal y como explica Alonso, también en un líder benefactor. «Herodes fue el mejor rey de los judíos. Más que David, cuya figura me parece una composición teológica», suscribe. «Herodes fue el mejor rey de los judíos. Más que David, cuya figura me parece una composición teológica» Javier AlonsoAlonso sabe citar de carrerilla las mejoras que impulsó Herodes para que «Jerusalén dejase de ser una ciudad de tercera categoría y se convirtiera en una verdadera maravilla del Mediterráneo oriental». Una de ellas fue «un colosal templo que no había levantado antes ningún monarca judío»; aunque la más destacada fue la construcción de Cesarea Marítima . «Ese puerto absorbió gran parte del tráfico marítimo que venía de las rutas de las especias y recibió muchos buques que antes hubieran partido o de Gaza, o de Alejandría», sentencia. A partir de entonces, todos los productos que llegaban de Oriente pasaban por su reino. «Ese fue su gran negocio, lo que le dio un dinero que, a su vez, volvió a invertir en obra pública», sentencia el profesor.Cornelis van Haarlem, 'Matanza de los inocentes', 1590, Rijksmuseum, Ámsterdam ABCFortalezas, ciudades, murallas… Herodes, tiene claro Alonso, enriqueció Jerusalén de una manera inimaginable. «Hasta demostró bondad cuando vendió parte de su tesoro personal para alimentar al pueblo después de un terremoto», completa. Con todo, no esconde que tenía un lado oscuro : «No podemos negar que fue también un personaje cruel. Octavio Augusto dijo que prefería ser un cerdo antes que un hijo de Herodes porque es cierto que asesinó a tres de ellos. Aunque lo que no se suele decir es que todos a los que mató se habían rebelado contra él». En este sentido, el autor es claro: «¿Sería más cruel que otros gobernantes de la Antigüedad? Con total probabilidad, no. Era un personaje real, con su cara buena y su reverso malo, como todos».

