Un nuevo escándalo de corrupción agrava la crisis de la cúpula del fútbol argentino
Una investigación destapa el presunto desvío de más de 40 millones de dólares a sociedades fantasma
La cúpula de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) atraviesa su peor crisis en años por motivos ajenos a lo deportivo. Los casos por presunta corrupción contra el presidente de la AFA, Claudio Tapia, y su círculo cercano se multiplican en medios de comunicación y juzgados mientras los aludidos se declaran víctimas de una campaña difamatoria. El último escándalo apunta a un presunto desvío millonario de fondos desde la empresa que gestiona los ingresos de la entidad en el exterior. Este martes la justicia ordenó levantar el secreto fiscal y bursátil de Tapia y la policía impidió que un empresario cercano a él, Javier Faroni, saliese de Argentina.
Según una investigación publicada por el diario La Nación este domingo, la empresa TourProdEnter LLC acumuló 260 millones de dólares en bancos estadounidenses gracias al pago de sponsors de la selección campeona del mundo, derechos de retransmisión televisiva y partidos amistosos. De esos ingresos, según la documentación a la que tuvieron acceso los periodistas, al menos 42 millones terminaron en cuatro sociedades con sede en Miami.
TourProdEnter LLC se creó a finales de 2021, con la dirección de Erica Gillette, pareja de Faroni, el empresario amigo de Tapia al que la Policía retuvo el pasaporte este martes e impidió salir de Argentina. Ninguna de las cuatro sociedades a las que esta compañía envío fondos tiene empleados ni registra actividad verificada. Esas características hacen sospechar que se trata de sociedades pantalla para desviar dinero, una hipótesis que deberá confirmar o rechazar la justicia.
La cúpula del fútbol argentino emitió el lunes un duro comunicado en el que niega haber cometido delito alguno. “La AFA manifiesta su más enérgico rechazo a la campaña de difamación dirigida contra la propia institución, su presidente, Claudio Tapia, y su tesorero, Pablo Toviggino”, dice el texto. La entidad argentina detalló que tiene un contrato vigente con la firma TourProdenter LLC y que ninguna investigación judicial ni en Estados Unidos ni Argentina ha detectado irregularidades en esa relación contractual.
Para la AFA, detrás de las nuevas acusaciones está el empresario Guillermo Tofoni, secundado por el Gobierno de Javier Milei, que libra una guerra contra Tapia desde que el dirigente futbolístico se negó a autorizar la transformación de los clubes argentinos en sociedades anónimas deportivas. La entidad considera que el objetivo de la revelación periodística es “generar un clima de deslegitimación y desestabilización institucional”.